20 de junio de 2012

Mientras me aguanten los huesos

"Sé que no puedo dormir porque siempre estoy soñando: en invierno con el sol, con las nubes en verano". Soñar incoherencias, cosas absurdas, un mundo patas para arriba, nos quitará el sueño, nos mantendrá despiertos por las noches, pero tiene un no se que particular que lo hace casi adictivo.
Luego de días de esa confusión casi puber (como bien señaló una amiga por allí), encuentro la calma y la paz necesaria en mi propia cotidianidad.
Es extraño, porque mucha gente le teme a estar sola (yo era así hasta hace unos años), le tiene miedo a la rutina, a quedarse en casa, a lo cotidiano.
Y sin embargo yo encuentro en este espacio y tiempo tan mío algo que nadie me puede perturbar.
Después de días de no estar cómoda ni en mi propia cama, volver a sentir ese algo particular que me da la soledad, esa conexión conmigo misma que me deja ser más allá de la hostilidad del mundo exterior.
Quizás algunos lo vean como una forma de acorazarme, de esconderme atrás de un escudo. Yo creo que es al revés, creo que plantarme sobre mi propio terreno me da otra posición para enfrentarme al mundo, otra seguridad. No me escondo, al contrario, yo le pongo el pecho a todo lo que siento, pienso y a las consecuencias que eso trae en mi vida.
Así que sin planes ni ataduras me zambullo nuevamente a la vida, sin miedo a los golpes que puedo recibir, solo miedo a no estar tomando las decisiones correctas.



17 de junio de 2012

Ser o no ser

Tantas ideas corren por mi cabeza que a veces siento que si logro capturar una sola, aunque sea, voy a entender algo. Pero no, no creo que sea tan fácil, creo que este caos en algún punto me sirve. ¿En qué punto? No lo sé, no lo termino de entender tampoco, pero tanta energía dando vueltas no puede ser gratis, alguna consecuencia tiene que tener, algo se está gestando en esta mi cabecita, será una idea, una conclusión, un plan. No lo sé.
¿Será mi maldita necesidad de meter todo en su correcta estructura e ir cerrando asuntos? Es posible, pero no creo tampoco que sea algo tan sencillo. Lo que siento en este momento es que me faltan piezas del rompe cabezas. No, no me faltan jugadores ni caramelos en el tarro. Me refiero  a que me faltan pedazos de la situación para terminar de armar el cuadro y ver las cosas como tienen que ser o no ser.
siempre me costó mucho luchar contra mis impulsos, pensar en frío, dejar que las cosas se acomoden solas. No es mi filosofía, no creo que sea la solución a nada. Pero la gente dice que a veces la inacción es una manera de hacer algo, es una decisión tomada no actuar, quedarse quieto, esperar.
¿Esperar qué? No tengo idea, si lo supiera todas estas ideas que corren en mi cabeza se quedarían quietitas un momento y me dejarían ver lo que hay de fondo, aquello que las entrelaza, aquello que no alcanzo a ver.
¿Vieron esos momentos en que cada frase de una canción, de un libro, los remite a algo pero no pueden terminar de saber a qué? Quizás nunca les pasó, pero eso es lo que me está pasando a mí. Y si hay algo que me descoloca es la incertidumbre, no saber que hacer, no saber qué me pasa, no saber que siento, que pienso.
Dejarme ser o padecer en el intento, esa parece ser la cuestión.

16 de junio de 2012

Demasiado silencio

A veces extraño correr a fondo y estrellarme contra la pared, no soy una persona pasiva (siempre lo digo), no sirvo para quedarme sentada y esperar que el mundo pase.
Pero a veces uno no sabe que hacer, o no tiene nada para hacer, no hay ningún objetivo que nos movilice, que nos haga arrancar.
Si, es así, extraño correr riesgos, extraño la adrenalina del no saber que va a pasar, el miedo a las consecuencias, a las heridas, a las cicatrices.
Quiero sentir esa energía que fluye adentro antes del golpe, esa sensación única que da correr un riesgo.
Soy así, que le voy a hacer, la monotonía me está matando, extraño la pasión en cualquiera de sus facetas. ¿Está girando el mundo? A pararlo y darlo vuelta, que gire para el otro lado o que se quede quieto y seamos nosotros los que lo hagamos girar a fuerza de correr sin rumbo.